Los zaragozanos, caminamos todos los días por calles, avenidas, parques y otros lugares de nuestra ciudad sin prestar atención a todo lo que nos rodea y sin saborear ni apreciar lo que tenemos delante de nuestros ojos.
A menudo, visitamos como turistas otras lugares, y en ese momento cambiamos el "chic" y nos paramos a contemplar hermosos edificios, estatuas, y todo tipo de cosas que llaman poderosamente nuestra atención sin darnos cuenta, de que aquí mismo cada día podemos disfrutar de cosas tan hermosas o más, pero que por la costumbre de verlas y por la falta de tiempo no apreciamos.
Vamos a dar un pequeño paseo por nuestra querida Zaragoza y trataremos de darnos cuenta de lo hermosa que es y de todo el partido que podemos sacarle. Intentaremos mirarla con otros ojos y descubrir todo lo que se esconde tras nuestra cotidianidad.
| Basílica de nuestra Sra. del Pilar y el río Ebro
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